Transición

El jueves por fín firmo mi hipoteca, mi casa! Mía! Por lo cual me supone un cambio de actitudes y modos de vida.

Cierto es que no me podía pasar toda la vida de fiesta en fiesta ni con total predisposición a planes ó actividades sin pensar en lo económico ni en nada; pero como época de transición de mi divorcio a la vuelta a la madurez a sido absolutamente maravilloso!

De vez en cuando debemos perder un poco la cabeza, dejarnos llevar (siempre hasta unos límites y de forma sana y respetuosa), ser impulsivos.... que bien sienta!

Ahora he cambiado consciente de que tengo que hacerlo, por mi hipoteca, porque ya no soy una niña, porque hay más cosas en la vida que salir... por lo que sea, pero no por imposición sino por convicción propia, segura de que quiero cambiar mi actitud por mí misma, convencida, que es como realmente salen bien las cosas.

En estos meses desde que me divorcié he vivido muchas cosas, he tenido pareja, me salió mal, seguí para adelante (por supuesto), me he ido a la playa con unas amigas un fin de semana en el que nos reímos muchísimo, tomamos el sol, comimos chopitos...; me he ido a las fiesta del Cristo de Jerte, a los San Juanes de Coria; al Orgullo Gay a Madrid, visité por primera vez Chueca me lo pasé genial! Carrozas preciosas, trajes espectaculares; también a la concentración de motos de Jaraiz de la Vera, que nos quedamos en casa de la abuela de un amigo, casa antigua, con el típico papel pintado en las paredes, camas con cabeceros de forja, en el centro....; me he recorrido las piscinas naturales de los alrededores; he estado en Valencia 3 días, playa, oceanográfico, ciudad de las ciencias, carrera de formula 1, estando allí nos acercamos a Vinarós a ver a unos amigos que viven allí, estuvimos de fiesta, disfrutamos de su compañía y de sus amigos, nos trataron fenomenal; hoy he llegado de las ferias de Jerte..... Vamos que no he perdido el tiempo este verano! He intentado disfrutar todo lo que he podido, sabiendo y teniendo en cuenta que era eso, una etapa de transición, algo que tenía que acabar, una forma de vida para un tiempo limitado.

Ahora me queda disfrutar de otra manera, igualmente satisfactoria. Disfrutar de mi casa nueva, de mis padres, una vida más familiar, de mi hermano y mi cuñada y el peque que les viene en camino, de mis amigos pero en casita, tomando algo allí, tranquilos, sentados, riéndonos y contándonos nuestras cosas, trabajando, preparándome mi acceso a la universidad.... y muchas cosas más que irán surgiendo con el tiempo.

Toca relajación, madurez y orden